El pasado 24 de marzo -jueves- abrió sus puertas, después de varios meses de trabajos de restauración, el Pozo de la Nieve de Nava del Rey, un edificio singular de la localidad que ha permanecido cerrado durante más de tres décadas, por lo que su nueva apertura supone un descubrimiento para buena parte de la población, así como un recurso turístico más que añadir al rico patrimonio histórico-artístico de la localidad.
El acto inaugural contó con la presencia del Alcalde de Nava del Rey, Cirilo Moro; concejales de la Corporación Municipal, Autoridades provinciales y el Subdelegado del Gobierno, Cecilo Vadillo, quien inauguró las obras en presencia de numerosos vecinos.
El Pozo de la Nieve se ubica a las afueras del casco urbano, muy próximo a la charca-lavajo de las Cruces, en dirección a la ermita de Ntra. Sra. de la Concepción. La nieve traída desde las montañas se almacenaba en este pozo con diferentes fines; el principal de todos conseguir hielo con el que enfriar el agua, o bien elaborar aloja -nieve mezclada con miel y otras especias-, producto que se generalizó en la localidad entre durante los XVII-XVIII.
El Pozo de Nava del Rey se constituye básicamente de dos elementos destacados: el pozo propiamente dicho y el edificio que cubre al mismo. El pozo es una estructura troncocónica de unos 4 metros de diámetro en su parte inferior y 7 metros en la superior. El nivel actual del fondo se sitúa en la cota de -6,70 metros [tomando como cota 0 el suelo del edificio] y tiene una capacidad de almacenaje próxima a los 160 m3 de nieve. La construcción tiene anexo otro pequeño pozo para evacuar el agua del deshielo, así como una especie de desagüe que conduce hacia el 'lavajo de las Cruces'.
El edificio, si bien de propiedad municipal, ha sido administrado desde el siglo XVII por particulares y, sobre todo, por cofradías religiosas como la de Ánimas del Purgatorio, que gestionó en no pocas ocasiones los réditos de la venta de nieve para subsistir económicamente, contratar sus obras de arte, etc.
Con la llegada de las máquinas de hacer hielo el edificio quedó en desuso; incluso en 1906 el Ayuntamiento construyó anexo al pozo una casa-asilo de la que hoy únicamente quedan el recuerdo y algunas marcas en los muros exteriores del pozo. Asimismo, en la década de los sesenta del siglo XX el pozo se utilizó como almacén de paja y orujo, tabicándose sus puertas -años después- por razones de seguridad.
Últimamente, ante el acelerado deterioro del edificio y la falta de financiación por otras vías, el Ayuntamiento de Nava del Rey asumió la restauración del edificio con cargo al 'Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local' del Ministerio de Política Territorial y Administración Pública, con un presupuesto de 55.000 euros. La dirección del proyecto estuvo a cargo Alfonso González Gaisán, Arquitecto Municipal, adjudicándose la obra a la empresa 'Construcciones Sánchez Rey' de Nava del Rey.
El estudio y catalogación del pozo fue posible gracias al inventario 'Identificación, selección y estudio de viabilidad del patrimonio etnográfico inmueble de Castilla y León', realizado en el año 2007 por la Junta de Castilla y León y el Departamento de Urbanismo y Representación de la Arquitectura de la Universidad de Valladolid, estudio coordinado por Carlos Carricajo Carbajo, especialista en este tipo de construcciones, quien asistió al acto inaugural en compañía de Nicolás García Tapia, Académico de la Purísima Concepción, quien en abril de 2010 dio una conferencia en Nava del Rey sobre los diferentes usos de la nieve y las tipologías de los pozos de nieve, edificios prácticamente desaparecidos en Castilla y León, donde el ejemplo de Nava del Rey supone una grata excepción.
HORARIO - POZO NIEVE· VERANO (21 de junio-14 de septiembre): De 08 a 20 h.
· INVIERNO (15 de septiembre-20 de junio): De 08 a 18 h.
Foto superior: Miguel A. García Velasco.
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