La procesión del Domingo de Resurrección puso fin a la Semana de Pasión 2007 de Nava del Rey, que ha tenido como principal aliciente el
’50ª Aniversario fundacional de la cofradía de Jesús atado a la columna', así como la reaparición del 'Cristo del Perdón' en las procesiones navarresas.
A pesar de los pronósticos de lluvia, el
‘Domingo de Ramos’ amaneció con un sol radiante y animó a un buen número de vecinos y visitantes a presenciar el primero de los desfiles, que tuvo como escenario la Plaza de Oriente, donde el párroco -hisopo en mano- bendijo los clásicos manojos de laurel.
Llegado el
‘Miércoles Santo’, la ‘Procesión del Encuentro’ comenzó pasadas las 21 h. con algo más que frío. La ‘Virgen de la Soledad’ partió del 'Humilladero' escoltada por las cofradías del 'Santo Sepulcro', 'Buena Muerte' y un grupo de devotas que llegaron a la Plaza Mayor por la calle Baja del Castillo.
Por otro lado, el resto de cofradías acompañaban a la talla de Jesús Nazareno, entrando en el ágora navarrés por la Calle Evangelista para encontrarse con la Virgen en la Plaza Mayor. Finalizada la breve alocución del párroco, todas las cofradías partieron hacia el templo de los Santos Juanes y
ermita de la Vera Cruz, cerrando el desfile los ‘pasos‘ de 'Jesús Nazareno' y ‘Ntra. Sra. de la Soledad’.
El
'Jueves Santo', los vecinos y turistas no dejaron de mirar al cielo; pero esta vez no por miedo a perder las cosechas -como en tiempos pretéritos- sino por el aguanieve matutino que amenazó con suspender los eventos organizados. No obstante, la lluvia no retractó a los cofrades del 'Santo Sepulcro', que durante la mañana recorrieron a caballo la Ciudad
pregonando los actos de la 'Pasión'.
Con esta incertidumbre por el tiempo, pasaban las once de la noche cuando se inició la procesión de ‘Paz y Renconciliación’, en la que desfiló ‘Cristo del Perdón’, que no lo hacía desde 1975 a causa de una grieta en la rodilla. Así, entre aplausos, comenzó la procesión con las imágenes de ‘Ntra. Sra. de la Soledad’ y del ‘Cristo del Perdón’, que recorrieron las Calles Bautista, Plaza Leciniana, Manuel Salvador Carmona y Rodríguez Chico, a la inversa de lo programado por la Junta de Semana Santa.
Como novedad, las bandas de cornetas y tambores no lucieron el habitual capuchón y ofrecieron sus mejores marchas -con la rivalidad de siempre- en la Plaza Leciniana, donde se congregaba numeroso público. Cabe señalar que si bien la lluvia respetó la procesión, el frío no concedió la misma gracia a los devotos y curiosos que presenciaron el desfile.
El procesional
‘Viernes Santo’ comenzó muy temprano. Y es que pasaban unos minutos de las siete y media de la mañana cuando el ‘Cristo del Perdón’ volvía a la calle para participar en el
'Viacrucis'. La procesión era guiada por una sencilla cruz de madera -portada espontáneamente por los fieles- que antiguamente utilizó la Venerable Orden Tercera de San Francisco. Los devotos -menos de un centenar- escoltaron a la imagen del Perdón acompañados por el silencio del amanecer. Imprevisiblemente se varió el recorrido y la comitiva alargó su discurrir hasta el convento de las
Madres Capuchinas, donde la imagen se venera durante todo el año.
Seguidamente, la procesión continuó el recorrido previsto por la Calle Pastores, momento en el que comenzó a caer una lluvia fina, que se hizo más bien pesada entre los allí presentes al ver cómo se mojaba -levemente- la talla del 'Cristo del Perdón'. Así, el ritmo se aligeró notablemente, si bien minutos después la lluvia desapareció y las ‘Estaciones’ se leyeron con normalidad.
La ‘mañana del Viernes de Pasión’ continuó en la parroquial de los Santos Juanes con el tradicional ‘Lavatorio’ del Cristo yacente de la hermandad del Santo Sepulcro que, por delegación de la Presidenta, realizó con no poca emoción el cofrade Gerardo Álvarez. Seguidamente, los cofrades continuaron con el ritual de la
'Crucifixión' y ya en la tarde se escenificó el ‘Descendimiento’ de la imagen crucificada por la mañana, en uno de los actos que suscita mayor interés y emoción entre vecinos y visitantes.
En la noche, la procesión general de ‘La Pasión’ recorrió las calles Bautista, Manuel Salvador Carmona, Pastores y Rodríguez Chico. Las cofradías, con un paso más lento de lo habitual -no falto de cierta polémica- llegaron a la Plaza Mayor, donde se alinearon los ‘pasos’ del Santo Sepulcro, Nazareno, Virgen de la Soledad y Cristo del Perdón en dirección a uno de los balcones, desde donde se entonaron dos emotivas saetas. Seguidamente, cada cofradía hizo su particular recorrido hasta su templo y se dio por finalizada la procesión.
El
Sábado Santo, sin procesión alguna, contó con el traslado del 'Cristo del Perdón' al 'Convento de las MM. Capuchinas'. Así, no eran las 11 de la mañana cuando siete cofrades -vestidos con hábito y capuchón- de la hermandad de 'Jesús atado a la columna' y otras tantas personas llevaron al ‘Cristo del Perdón’ al Convento de las MM. Capuchinas, en algo más propio de un acto interno de cofradía que una procesión.
El festivo
‘Domingo de Resurrección’ terminó con la habitual procesión del 'Encuentro del Resucitado y la Virgen de la Alegría' en la Plaza Mayor. A su término y de forma más
distendida, los cofrades se reunieron en ágapes y comidas de hermandad para despedirse de los meses de ensayo, organización, procesiones, flores, ‘pasos’, esculturas... y, en definitiva, de la Semana Santa 2007.